EEUU y John McCain

Si hay un punto en que los estadounidenses estamos de acuerdo es en la valoración humana, íntegra, honesta y patriótica del Sen. John McCain, quien a pesar de no ganar la Presidencia de EEUU sí supo ganarse el respeto y la consideración no sólo de sus seguidores sino de sus propios oponentes en la contienda electoral de este 2008.

Creo que John McCain en su intima convicción debe estar tranquilo y en paz, porque a pesar de representar a un partido que fué a elecciones estando en el poder y en medio de una crísis económica de escala mundial, y dicho sea de paso, con recursos económicos limitados para competir con los que tenia su oponente, pudo llegar a alcanzar un 46% del voto popular de los Estados Unidos. McCain es un político que muchos consideran del CENTRO, como han sido la mayoría de los Presidentes en EEUU como Ronald Reagan, Bill Clinton y como fué la propuesta de la Sen. Hillary Clinton en la pre-campaña, pero sencillamente no fué su mejor momento, y así lo expresó ante sus seguidores.

Hombre de carrera militar y política, buen padre y con un excelente record de trabajos bipartidístas en el Senado (todos sus colegas del Senado hablan bien de su persona), llevan al Sen. John McCain a ser una persona importante y necesaria por su experiencia para ayudar a su partido a calar en el pueblo norteamericano como lo hizo Ronald Reagan en su tiempo, pero especialmente para colaborar con el Presidente electo en los retos que le esperan.

Anoche en su discurso de felicitación al Sen. Barak Obama, para el que dijo "pese a mis diferencias filosóficas le tengo un gran respeto y lo reconozco como mi Presidente" y como nobleza, obliga, observé a un líder de grandes condiciones y convicciones humanas, un hombre que por su historial y por lo que expresa ama profundamente su país y no escatima ningún esfuerzo por cerrar filas por él, ofreciendo su respaldo y colaboración al Presidente electo, sus palabras fueron conmovedoras y esperanzadoras para unificar a esta nación. Se necesitan muchos John McCain en los Estados Unidos, con ese espíritu, amor y dedicación a su patria.

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